jueves, 10 de noviembre de 2011

Pepenando palabras de amor

Hay palabras que resuenan en el viento, no son mías por ocurrencia, pero las adopto y las vierto aquí en este blog porque son "palabras flecha" de Eros contra Tánatos:

De B. Brecht:
"El arte no es un espejo para reflejar la realidad, sino un martillo para darle forma." 

"El regalo más grande que le puedes dar a los demás es el ejemplo de tu propia vida."

"Si la gente quiere ver sólo las cosas que pueden entender, no tendrían que ir al teatro tendrían que ir al baño"

"No acepten lo habitual como cosa natural pues en tiempos de desorden sangriento, de confusion organizada, de arbitrariedad conciente, de humanidad deshumanizada, nada debe parecer imposible de cambiar". 

De G. Deleuze:
«El sentido no es nunca principio ni origen, sino producto. No hay que descubrirlo, restaurarlo, ni reemplearlo sino que hay que producirlo mediante una nueva maquinaria.»

«La tristeza no vuelve inteligente. En la tristeza estamos perdidos. Por eso los poderes tienen necesidad de que los sujetos sean tristes. La angustia nunca ha sido un juego de cultura, de inteligencia o de vivacidad. Cuando usted tiene un afecto triste, es que un cuerpo actúa sobre el suyo, un alma actúa sobre la suya en condiciones tales y bajo una relación que no conviene con la suya. Desde entonces nada en la tristeza puede inducirlo a formar la noción común, es decir, la idea de algo común entre dos cuerpos y dos almas.»

«No cargar la vida bajo el peso de los valores superiores, incluso los heroicos, sino crear valores nuevos que sean los de la vida, que hagan de la vida lo ligero o lo afirmativo.»

«No hay lugar para el temor, ni para la esperanza. Sólo cabe buscar nuevas armas.» 

De S. Freud:
"Existen dos maneras de ser feliz en esta vida: una es hacerse el idiota y la otra serlo."

"He sido un hombre afortunado en la vida: nada me fue fácil."

"La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas."

"El primer humano que insultó a su enemigo en vez de tirarle una piedra fue el fundador de la civilización."

"El que ama, se hace humilde. Aquellos que aman, por decirlo de alguna manera, renuncian a una parte de su narcisismo."

“La incapacidad para tolerar la ambigüedad es la raíz de todas las neurosis”

"Nos moriremos todos, pero nuestras obras permanecerán."

"Si quieres vivir, prepárate para morir." 

"Quien piensa en fracasar, ya fracasó antes de intentar; quien piensa en ganar, lleva ya un paso adelante"

"Sólo la propia y personal experiencia hace al hombre sabio."

"Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que habla."

"Así como al jinete, si quiere permanecer sobre el caballo, a menudo no le queda otro remedio que conducirlo a donde este quiere ir , también elYO  suele trasponer en acción la voluntad del ELLO como si fuera la suya propia" 

"Donde reinaba el Ello, el Yo vendrá a reinar"

De J. Lacan
"Sólo los idiotas creen en la realidad del mundo, lo real es inmundo y hay que soportarlo"

De S. Dalí:
"De ninguna manera volveré a México. No soporto estar en un país más surrealista que mis pinturas."

 



miércoles, 9 de noviembre de 2011

Viejos Homenajes

A Drácula, Mefistófeles y el Lobo Feroz
–Lo siento de veras, pero en este momento no puedo invitarte a pasar
Cuando pronuncié esas palabras, él se derritió ante mis ojos emitiendo un lamento sobrenatural. Se disolvió dejando una marca en la entrada de mi casa.
Ahora todos creen que se trata del tapete de bienvenida y, ahí mismo, se limpian los zapatos.

A Jesucristo y sus biógrafos.
"No sabía qué hacer, realmente se sentía muy mal, así que elevó una oración sentida y suplicante al Señor, le declaró su devoción, le ofrendó su corazón, pero como Dios no respondía, lanzó una moneda al aire para que así se definiera su destino... Cayó cruz."

A Mr. Hyde
Cuando Dios descubrió a su "Otro Yo" ¿Sabéis lo que hizo? pues lo mandó al Infierno. Por eso, a Su imagen y semejanza nosotros lo hacemos igual.

Microficciones no tan ficticias...

Analizados
Cuenta la leyenda que un día, estando en plena batalla, los soldados del reino negro y los del reino blanco, hartos de que sus reyes les hicieran la vida de cuadritos, renunciaron por fin al juego y abandonaron, unidos, el tablero. Luego se supo: hoy viven en el reino de colores de las damas chinas.

Amor ciego
–¿Te gustan mis ojos?– Preguntó ella con aquella voz temblorosa, insegura y enamorada que él detestaba.
–Demasiado condimentados, como todo lo que cocinas– respondió él molesto, se levantó de la mesa y azotó la puerta tras de sí.

Vivencial
–Yo vivía en una cuevita, al igual que muchos de mis vecinos. Las cuevitas tenían puertitas– dijo ella.
–¡Es usted un hobbit!–Le dije y respondió que sí, de San Felipe, Guanajuato.
No conocía a Frodo ni a Bilbo, pero sí a Jobita, la de la tienda del psiquiátrico.
Me preguntaron después si realmente sabría ella lo que era un hobbit... mejor que Tolkien, sin lugar a dudas; ella vivía en una cuevita, él no.

Insight
Come caca... ¡Y no me des!

Histeria
–¿Por qué ella tiene casita de hacer bebés y yo no, Mami?
–Cuando crezcas lo entenderás, mi pequeño Sigmund.

Ni caso
Aquel guru era tan digno de poca confianza, que quien lo seguía como tal, definitivamente se lo merecía.

Perversión
Cada vez que veía un pie desnudo se excitaba hasta el orgasmo. Dadas las circunstancias, se decidió que tomara ansiolíticos para ver si así podía salir, sin riesgo político, a buscar por todo el reino a la bella chica que abandonó el baile en aquel carro-calabaza.

Rehabilitación
Fetichista de clóset, se alarmaba casi hasta el escándalo cuando pasaba frente a una zapatería. Cuando supo de la existencia de la orden de “las carmelitas descalzas”, le pareció tal aberración, que simplemente no pudo más y se internó... Hoy se gana la vida siendo pedicurista. Algo pasó, ciertamente, en aquel monasterio zen.

 Trauma
–El superyó viene siendo algo así como la figura de autoridad internalizada, tras superar, por identificación con el poder paterno, la amenaza de castración– dijo el experto en Freud.
–La democracia es una forma económica de ejercer el poder judicial, precisamente porque cada ciudadano se convierte en policía de sí mismo y de los otros– añadió el especialista en Foucault.
–No es lo mismo tener por superyó un british policeman que un indulgente policleto, siempre puesto a negociar por una torta y un chesco ¿Ven?– ejemplificó el experto en psicología del mexicano.